Moda, comunicación y sociedad.

El papel principal de los medios de comunicación, como es bien sabido y apoyado por Wilbur Schramm, es crear un vínculo informativo que transmita cercanía y simpatía.
Esta teoría se ve reforzada por la teoría de Robert Merton: “los Medios de comunicación son instrumentos de control social que contribuyen al equilibrio necesario” También afirma que gracias a ellos se determina la función o funciones de la sociedad. El papel del funcionalismo es, pues, analizar los elementos que no funcionan en la sociedad para aislarlos y corregirlos, para que así la sociedad pueda seguir evolucionando.
Un campo en el que se ve perfectamente el control que los medios ejercen sobre la sociedad es el de la moda.

Los medios de comunicación y el mundo de la moda han estado, desde siempre muy unidos, volviéndose poco a poco inseparables. En mi opinión uno no podría sobrevivir sin el otro, especialmente la supervivencia de la moda se vería muy perjudicada sin los medios de comunicación.
Estos son los responsables de que la moda haya adquirido la importancia y la relevancia sociológica que tiene hoy en día. La moda ha creado toda una sociedad y una forma de vida y de pensamiento.

La moda está enfocada, en su mayoría, a la juventud.
Teniendo en cuenta que la juventud de hoy en día poco tiene que ver con la de hace unos años. Los jóvenes actuales, son personas que se han criado en casas donde no les ha faltado nunca de nada, en las cuales sus padres se han desvivido siempre por que tengan una juventud mejor que la suya, sin saber dónde está el límite entre vivir bien y consentir demasiado.
Como consecuencia vivimos rodeados de niños caprichosos que, por supuesto, siempre reciben todo lo que desean y sin demasiado, por no decir ningún, esfuerzo.

Los medios y el sector de la moda han sabido aprovechar este fenómeno para dirigir sus productos, en este caso ropa y complementos, para enfocar la mayoría de sus campañas a esta parte de la sociedad.
Ante un público tan fácilmente moldeable y accesible no les ha sido complicado conseguir que la moda sea un elemento principal y necesario en sus vidas.

Se ha creado a raíz de esto una sociedad que rinde culto, en mayor o menor medida, a determinados diseñadores de moda, personajes públicos o estilos que pueden desde transmitir sentimientos a comunicar una ideología.

Nadie se escapa de la fiebre de la moda, ni siquiera aquellos que por principios, la consideran vanal.