La feria de moda urbana B&B que se ha celebrado por última vez en Barcelona del 21 al 23 de enero, nos ha dejado las tendencias que marcarán la moda más urbana para el otoño-invierno 2009.
Se apuesta por las prendas de trabajo, el look masculino y la ropa tejana. El pantalón vaquero se convertirá en la pieza imprescindible y el tejido denim se apoderará de camisas, chaquetas y cazadoras, todo en color azul desgastado. Las sudaderas con capucha, las bambas de atrevidos diseños y colores y las camisetas con lemas amables y grafías infantiles serán prendas imprescindibles en cualquier armario que se precie.
Otra de las tendencias que se auguran, es la mezcla de texturas, texturas sintéticas y naturales convivirán en la misma prenda. En cuánto a colores, el negro pierde fuerza mientras que los tonos azul, morado, caldera, amatista, verde y púrpura serán lo más.
Un aspecto a destacar, es que en esta edición la moda tiende a ser atemporal. Dejando de lado los abrigos, el resto de ropa expuesta no parece pensada para la época más fría, parece ser que cada vez tiene menos sentido seguir el tradicional otoño-invierno y primavera-verano.
¿Qué pensáis?
Mi abuela quiere mi ropa
Se apuesta por las prendas de trabajo, el look masculino y la ropa tejana. El pantalón vaquero se convertirá en la pieza imprescindible y el tejido denim se apoderará de camisas, chaquetas y cazadoras, todo en color azul desgastado. Las sudaderas con capucha, las bambas de atrevidos diseños y colores y las camisetas con lemas amables y grafías infantiles serán prendas imprescindibles en cualquier armario que se precie.
Otra de las tendencias que se auguran, es la mezcla de texturas, texturas sintéticas y naturales convivirán en la misma prenda. En cuánto a colores, el negro pierde fuerza mientras que los tonos azul, morado, caldera, amatista, verde y púrpura serán lo más.
Un aspecto a destacar, es que en esta edición la moda tiende a ser atemporal. Dejando de lado los abrigos, el resto de ropa expuesta no parece pensada para la época más fría, parece ser que cada vez tiene menos sentido seguir el tradicional otoño-invierno y primavera-verano.
¿Qué pensáis?
Mi abuela quiere mi ropa
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